Como una gata en celo
(más oscura que la noche,
negra como la profundidad de tus pupilas)
me arrastro por los tejados de tu mente,
maullando desde lejos para que me mires,
para que percibas mi corazón caliente.
No está caliente de calentura,
está abierto en dos,
afiebrado de ternura
por que se ha descongelado
(supo amarte)
y ahora siente mucho frío
...y busca tu abrigo
tu abrazo real,
un lugar en la cama de tu alma.
Escúchame - te lo pido-
Mis uñas pintadas de rojo
se clavan en techos desconocidos
mi olfato te rastrea
esforzándose por oler en la atmósfera
un diminuto vestigio de tu presencia,
(barro con mi escoba las migajas de tu ausencia)
mientras camino
por aromas ajenos
hogares que no son míos
familias que ríen y besan a sus hijos
amores que se besan mientras cocinan
fuegos encendidos en las chimeneas,
y -de pronto- un ardor inmenso que se me prende en el vientre
y sube hasta mi garganta
como una daga filosa de nostalgia
agudo chirrido por dentro
como un freno repentino
que no me deja maullar más...
(sólo expresar un quejido tenue) ...lamento lamiendo mis labios en sórdida espera...
ya se empiezan a quebrar mis garras...
la boca se me despinta...
el rimel gotea como lluvia lenta
Mi silueta se desliza como hembra ensombrecida...
mujer sinuosa en sol menor
melódicamente espesa como un triste blues...
-la ciudad es tan grande... y sin ti, no encuentro mi refugio...-
© 2007 by Orquídea
2 comentarios:
Me gustó leer tus letras repletas de sensaciones, nostalgias y el toque mágico de la espera...
Te abrazo
MentesSueltas
Querida Orquídea: es tan gráfica tu descripción, tan real tu relato que me monté a tí en tu paseo por el tejado y lloré contigo al quedar con la ilusión perdida.
Hermoso!!!! Tristemente hermoso!!!!
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